Mi lealtad no está en negociación

Lealtad

La lealtad es un deseo de comportamiento positivo,  

en beneficio de las personas que amas;  es una opción de vivir con compromiso hacia sí mismo y hacia alguien más.

Hay una satisfacción al interior de cada acto de lealtad, que solo lo puede sentir aquel que sabe que su amor y aprecio por sí mismo y por el otro va mas allá de cualquier negociación en donde obtenga algún beneficio.

En las dinámicas sociales se presentan múltiples momentos en los que se puede ver en peligro la lealtad que sustenta nuestras relaciones;  pero solo quienes están fortalecidos,  no se deja manipular ni tentar por nada.

Algunas tentaciones o ideas que te pueden sacar de tu camino pueden ser por ejemplo, alejarte de tu propio desarrollo intelectual y emocional, pues llega alguien que te trata de convencer de que el crecimiento intelectual y emocional no son necesarios para triunfar.

¡Qué error!

La lealtad a sí mismos es la fuerza que te permitirá ser constante en la consecución del objetivo.

Tolerar el saboteo de nuestra personalidad es un acto de total falta de lealtad a nuestros ideales.

¿Y qué decir si permitimos fallarnos en la lealtad hacia sí mismos,  cómo será con los otros?

¡ESO NO SE DEBE PERMITIR!  

 

 

Ser leal no significa tolerar que los otros actúen incorrectamente y tu no manifiestes tu descontento.

¿Cómo enseñar la lealtad a nuestra familia?

  • Siendo una persona leal a sus propios ideales, personalidad y pensamiento, así sus familiares aprenden "lealtad" por el ejemplo.
  • Demostrando comprensión cuando alguien de la familia, escuela o trabajo, reconoce sus propias culpas para no incrimina a los demás.
  • Demostrando confianza a nuestros hijo/as, familiares, amigos y compañeros para que consulten sus dudas, sin temor a represalias.
  • Demostrando el cumplimiento de los acuerdos tácitos o explícitos en la familia, trabajo, estudios o sociedad.
  • Enseñando de forma práctica a los hijos que se puede confiar en ellos y pueden ser confidentes y colaboradores.
  • Demostrando lealtad a los principios religiosos, sociales y económicos.
  • Demostrando lealtad entre los esposos y con los hijo/as, familiares y amigos.
  • Demostrando lealtad y voluntad, para ayudar en las tareas de la casa, aportando cada uno sus máximas posibilidades, incluso antes de que los demás lo necesiten.
  • Demostrando que cuando alguien ha dado algo bueno, la familia le debe mucho más que agradecimiento.
  • Enseñar que se defiende lo que se cree y en quien se cree.
  • Demostrando que se puede ser leal, aunque se denuncie lo que está mal, a pesar de poder perder un amigo. 

Gracias por pasar por aquí y leer este artículo,  

seguro aumentará su valor si lo compartes

con personas a quien ames y estén dispuestos

a crecer y ver crecer a su familia.

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